El presidente federal alemán, Frank-Walter Steinmeier señaló que “Una era de vientos en contra está comenzando para Alemania: años difíciles, difíciles vienen para nosotros. Alemania está en la crisis más profunda desde la reunificación”
El desarrollo económico general alemán, descendió significativamente en octubre, con una caída del PIB de un 0,2% entre julio y septiembre en comparación con el trimestre anterior, señaló el Instituto Alemán de Investigación Económica ‘Deutsche Wirtschafts Nachrichten’.
Tanto el consumo como la inversión, se deterioraron fuertemente debido a la crisis energética y a las elevadas tasas de inflación, así como también debido enfriamiento general de la economía mundial. La crisis contribuye también a aumentar los costes de producción.
Consecuentemente muchas empresas quieren esperar a que pase el invierno para realizar nuevas inversiones, subrayó Laura Pagenhardt, experta del instituto.
Según los datos preliminares de la Oficina Federal de Estadística de Alemania, los precios al consumo armonizados con las normas de la UE, subieron un 11,6% interanual en octubre, y la tasa de inflación se aceleró desde el 10,9% de septiembre hasta una tasa anual del 10,4% en octubre y volvió a alcanzar un máximo histórico, el más alto desde diciembre de 1951. En términos mensuales, se redujo al 0,9% desde el 1,9%.
Por otro lado el 52% de las empresas alemanas están convencidas de que las cosas empeorarán para ellas en los próximos 12 meses, según una encuesta realizada por la Asociación de Cámaras de Industria y Comercio de Alemania.
También el elevado precio de la electricidad y el gas, provocó el traslado de los centros de producción a otros países, las empresas alemanas que operan en el extranjero tienen unas perspectivas mucho más optimistas que las que producen exclusivamente en Alemania.
Además el 51% de las empresas están preocupadas por el aumento de los costes laborales. Esto se debe no solo a un aumento del salario mínimo del país, sino también a las demandas de los empleados de un aumento de los salarios debido a la inflación.
En este contexto Olaf Scholz, reconoció que entre 20 y 30% de los ciudadanos de su país no apoyan las sanciones contra Rusia ni tampoco el envío de armas al régimen ucraniano. A pesar de la reacción de los alemanes Scholz anunció que seguiría apoyando a Kiev.
Sin embargo la coyuntura económica llevó al canciller alemán de visita a China. El profesor del Instituto de Relaciones Internacionales de la Universidad de Comunicación de China Yang Mian, cree que con esta visita Scholz dio una patada a Macron, y a sus homólogos estadounidenses.
Yang Mian señaló que “Las diferencias ideológicas generaron un sentimiento anti chino en Occidente, y también surgió un lobby anti chino en los círculos políticos alemanes. Además, en el Gobierno de coalición tripartita de Alemania, el Partido Verde es ferozmente anti chino, por lo que las protestas contra la visita de Scholz a China no son sorprendentes”
Cabe señalar que las economías de China y Alemania están estrechamente vinculadas. A raíz de la reciente y sonada adquisición del puerto de Hamburgo por parte de una empresa china, Scholz insistió en que la inversión china en este importante puerto sería beneficiosa para el futuro desarrollo económico.
Según Yang Mian, “La visita de Scholz a China es el resultado de un compromiso político interno en Alemania. Beneficiará las relaciones entre China y Alemania. También refleja el hecho de que Alemania tendrá en cuenta, en última instancia, sus propios intereses de desarrollo y no está totalmente sujeta a las órdenes de EEUU“
Mijaíl Beliáev, politólogo y experto en las relaciones entre la UE y China, sostiene que bajo esta coyuntura internacional, EEUU es el titiritero de los opositores al desarrollo de las relaciones de Alemania con China.
Para Beliáev “Está claro que los opositores de Scholz cantan a instancias de EEUU, el guion para los intérpretes alemanes de esta canción fue desarrollado por titiriteros estadounidenses. La decisión de Scholz de dialogar con China se vio presionada por las circunstancias. Se impuso un enfoque sobrio. Se dio cuenta de que simplemente no había otro camino para él, ni para los intereses alemanes. China es, y seguirá siendo, el mayor mercado de Alemania en Asia”
Para Mijaíl Beliáev “si el canciller sigue el consejo de los llamados asesores estadounidenses, la crisis en Alemania solo se agravará y conducirá a la desindustrialización del país, con consecuencias nefastas tanto para el país como para Europa”.
E insiste que “China ofrece a Alemania una plataforma a la que las empresas alemanas pueden dirigir sus esfuerzos. Esto incluye capital, comercio y exportaciones de capital“
El experto señala que la base para el futuro desarrollo de las relaciones comerciales entre China y Alemania, consiste en el tamaño del mercado chino. También influye el estado actual de la ciencia y la tecnología del país; China no está estancada y ofrece un mercado en desarrollo.
Sin embargo Lee Wang Hwi, analista internacional, cree que Alemania no puede adoptar una línea independiente y perseguir sus propios intereses sin dejar de formar parte de la comunidad occidental.
Para Lee Wang Hwi “El actual acercamiento solo puede considerarse un periodo de transición. Ahora hay una lucha de poder entre EEUU y China. Kissinger ya había reclutado a China para contener a la URSS. Y Trump intentó el mismo método poniendo a Rusia de su lado para contener a China. Porque incluso un Estado militar y económicamente poderoso como EEUU no puede tener como enemigos a Rusia y a China al mismo tiempo. Por eso, el factor decisivo será este invierno. Si hace frío en Europa y la gente empieza a congelarse y a morir de frío, no tendrán a dónde ir, tendrán que hacer las paces con alguien. Queda muy poco tiempo para que se decidan”
Fuentes cercanas al canciller, señalan que Scholz habría ido a Beijing para establecer pasos preparatorios, para a un acuerdo de paz con Rusia, con China como intermediario. Expertos en geopolítica anunciaron que el viaje a China de Scholz podría estar iniciando, un largo proceso para reemplazar a los Estados Unidos con China como un aliado clave.
Cabe resaltar que Scholz enfatizó a los medios chinos, que Alemania no tiene intención de desacoplarse de China, y que no hay nada que justifique los llamados para aislar a China.