Esta mañana hubo tres explosiones en Irán, cerca de la base militar de Shekari, del aeropuerto de Isfahá y de la ciudad de Qahjavarestan.
El gobierno israelí mantuvo silencio al respecto e Irán minimizó el alcance de las detonaciones. Sin embargo informaron medios estadounidenses, citando a funcionarios israelíes y estadounidenses no identificados, que Israel llevó a cabo un ataque aéreo a Irán la madrugada del viernes. EEUU aseguró que no estuvo involucrado en la ofensiva. Potencias mundiales instaron a evitar una escalada del conflicto.
The New York Times y The Washington Post citaron a funcionarios israelíes diciendo que Israel había llevado a cabo un ataque aéreo en Irán. Funcionarios estadounidenses fueron citados por varios medios de comunicación diciendo que se trataba de un ataque con misiles.
La ubicación o el objetivo del aparente ataque israelí no fueron identificados de inmediato. Aproximadamente una hora después de que surgieran los informes, un portavoz militar israelí contactado por la VOA dijo que no tenía comentarios «por el momento».
Los ministros de Exteriores del Grupo de los Siete reunidos en Capri, Italia, advirtieron de nuevas sanciones contra Irán por su ataque con drones y misiles contra Israel, e instaron a las dos partes a evitar una escalada del conflicto.
“El objetivo político es la desescalada», dijo a periodistas el ministro de Exteriores italiano, Antonio Tajani, que presidió la cumbre de tres días celebrada en Capri y que tuvo que ajustar su agenda para abordar los recientes acontecimientos.
Según Tajani, Estados Unidos informó a los cancilleres de que había sido “informado en el último minuto” por Israel acerca del operativo. «Pero no hubo participación en el ataque por parte de Estados Unidos. Fue mera información”, añadió.
En ese evento participó el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, quien ratificó que Washington estaba comprometido con la seguridad de Israel, y al ser consultado por el ataque a Irán, ratificó que Estados Unidos no estuvo involucrado en ninguna operación ofensiva.
“Se vio a Israel siendo el receptor de un ataque sin precedentes, pero nuestro enfoque ha estado, por supuesto, en asegurarnos de que Israel pueda defenderse efectivamente, pero también en reducir las tensiones y evitar el conflicto”, dijo Blinken.
Las agencias estatales de noticias iraníes IRNA y Fars dijeron que las defensas aéreas de la república islámica fueron activadas en una importante base aérea y una instalación nuclear cerca de la ciudad central de Isfahán, tras avistar aviones no tripulados.
El director de la agencia espacial iraní dijo que las fuerzas de defensa aérea derribaron varios drones.
Los medios estatales iraníes rápidamente intentaron restar importancia al incidente, diciendo que las instalaciones nucleares de Isfahán eran seguras. También dijeron que las operaciones en el aeropuerto internacional Imán Jomeini de Teherán y en el aeropuerto nacional de Mehrabad habían vuelto a la normalidad el viernes, varias horas después de que se suspendieran los vuelos en una aparente respuesta al supuesto ataque aéreo israelí.
Sería la última salva en una guerra en la sombra entre Israel e Irán que se ha intensificado significativamente este mes. Israel había advertido a Irán que tomaría represalias por un ataque aéreo iraní sin precedentes en territorio israelí el domingo pasado que involucró cientos de drones y misiles. Israel dijo que interceptó casi todos los proyectiles con la ayuda de una coalición de aliados occidentales y socios árabes.
Irán había advertido, a su vez, que cualquier ataque de represalia israelí sería respondido con una respuesta rápida y más dura. La ofensiva iraní se produjo tras la destrucción de su embajada en Siria y la muerte de varios altos mandos militares a inicios de mes, en un ataque que le atribuye a Israel, pero que éste no ha confirmado ni negado.
Estados Unidos y otras potencias occidentales habían instado al gobierno israelí a evitar una escalada del conflicto al calcular su próximo movimiento. Funcionarios estadounidenses habían dicho que no tenían la intención de que las fuerzas estadounidenses se unieran a ninguna acción de represalia israelí.
Ahmed Fouad Alkhatib, analista de seguridad de Medio Oriente en el Atlantic Council, dijo a la VOA que la administración Biden entendía la necesidad de Israel de llevar a cabo una represalia para «salvar las apariencias» por el ataque iraní del domingo.
«Cualquier ataque israelí requerirá la participación, la cooperación, el apoyo y el respaldo final de Estados Unidos, lo que pone en duda la exactitud de las afirmaciones de la administración Biden de que no estaría involucrada en una represalia israelí», dijo Alkhatib.
Fuente Voz de América
[El corresponsal de seguridad nacional de la VOA, Jeff Seldin, la jefa de la oficina de la VOA en La Casa Blanca, Patsy Widakuswara, y los servicios kurdos y persas de la VOA contribuyeron a este informe. También incluye información de The Associated Press y Reuters]