La Casa Blanca comunicó que “Los dos líderes discutirán cómo manejar la competencia entre nuestros dos países así como la guerra de Rusia en Ucrania y otros temas de interés común”
La discusión se realizará en el marco de una presión diplomática de EE. UU. y sus aliados europeos, por el rechazo de China a condenar a Rusia por la invasión de Ucrania.
El Gobierno chino ha mostrado pocas señales de abandonar la cooperación económica con Rusia. Como también se ha negado a condenar las acciones de Vladimir Putin. La semana pasada afirmó que la asociación entre los dos países era «sólida como una roca».
Según el portavoz del Ministerio de Comercio chino Gao Feng, China continuará la cooperación económica y comercial de manera normal.
El secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, criticó la postura de China frente al conflicto, señalando que está «en el lado equivocado de la historia».
La Cancillería china rechazó los comentarios este miércoles. Zhao Lijian, vocero de la embajada, calificó de «irresponsable» a Blinken y agregó que con esa declaración «calumnia y vilipendia a China, dejando al descubierto una mentalidad de la Guerra Fría con su antagonismo de bloques».
Gao Feng subrayó que China se opone a cualquier forma de sanciones unilaterales, argumentando que estas solo perjudican la vida de la población de los países afectados, además de desestabilizar el mercado mundial, afectando una economía mundial ralentizada.
A pesar de los entredichos, se reunieron en un hotel de Roma esta semana Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, con Yang Jiechi, principal diplomático del Partido Comunista Chino (PCCh). La Casa Blanca calificó la reunión como «trascendental.