En entrevista con la radio Som Maior de la ciudad de Criciuma, estado de Santa Catarina, Luiz Inácio Lula da Silva reveló algunas de sus estrategias económicas y políticas, como la intervención en el mercado de combustibles. En caso ser elegido, Lula afirmó que nacionalizará los precios de los combustibles que están dolarizados por la gestión de Bolsonaro.
«Hay que nacionalizar los precios de los combustibles. Brasil se transformó en un país dependiente que aplica precios en dólares cuando todos los costos internos son en reales. Brasil renunció a su soberanía energética y está destruyendo a Petrobras, que se alejó del desarrollo y está buscando apenas la ganancia para los accionistas en la bolsa de Estados Unidos» señalo Lula.
Según técnicos consultados, la nacionalización a la que se hace referencia, consistiría en desacoplar los precios internos con los internacionales; la población pagaría entonces el precio de los combustibles con costos locales, y no como combustible importado. El desacople otorgaría a la economía brasileña una mayor competitividad al reducir los costos de generación eléctrica y transporte.
Lula afirmó que la elección del 2 de octubre será muy polarizada. Para el ex mandatario la reconstrucción del país depende de que el fasismo no continue en el gobierno. Lula quiere ser un candidato de un movimiento para componer tanto los valores democráticos como la economía de Brasil.
El ex mandatario defendió también la posible incorporación del conservador Geraldo Alckmin como compañero de fórmula, como acuerdo para ampliar su base electoral y de gobierno. Alckmin, se deberá afiliar al Partido Socialista Brasileño (PSB) para intentar la formalización de un acuerdo con el PT para los comicios de octubre.
«Estoy convencido de que si podemos construir esa fórmula será un beneficio muy grande para Brasil y podremos hacer un gran gobierno si ganamos las elecciones. Vamos a ver si podemos construir ese entendimiento», dijo Lula.
En la entrevista, Lula explicó que en caso de ser electo, no le cerrará las puertas a negociar con el grupo de derecha Centrão, quien le otorga la mayoría parlamentaria a Bolsonaro.